El Instituto Internacional de Ciencias de la Vida (ILSI), es una organización mundial, sin ánimo de lucro cuya misión es la de proporcionar una base científica que procure mejorar la salud humana, su bienestar y salvaguardar el medio ambiente. ILSI fue fundada en Washington D.C., en el año de 1978 y durante los últimos 40 años ha establecido 16 entidades a nivel mundial con el fin de fomentar las alianzas científicas público-privadas y abordar las brechas de conocimiento en beneficio del bien público.
ILSI es una federación mundial, de entidades sin ánimo de lucro unidas por políticas y metas comunes de participar en las alianzas científicas público-privadas alrededor del mundo. Las Entidades de ILSI interactúan con científicos de la academia, agencias e instituciones gubernamentales, y la industria para promover la ciencia de la nutrición y la seguridad alimentaria en aras del mejoramiento de la salud pública. Las Entidades de ILSI reciben apoyo en especie en términos de tiempo y experiencia por parte de científicos voluntarios provenientes de la academia, el gobierno y fuera del mismo. La estructura de afiliación de cada Entidad de ILSI es única y es un reflejo de los requisitos legales locales y de otras condiciones. La información adicional se puede obtener en a las páginas Web de cada Entidad (ubicadas en el menú desplegable superior derecho).
Las organizaciones se unen a las Entidades de ILSI con el fin de colaborar con los científicos destacados provenientes de la academia, el gobierno y la industria para identificar y resolver asuntos científicos precompetitivos de interés común. Debido a sus estructuras únicas de carácter público-privado, las Entidades de ILSI llenan los vacíos de conocimiento y le sirven a la sociedad de maneras en las que ninguna organización lo podría hacer por sí misma. Conozca más sobre la Misión y los Principios Operacionales de ILSI.
El Instituto Internacional de Ciencias de la Vida:
- Proporciona un foro neutral para que los científicos provenientes de la academia, el gobierno, y la industria aborden los temas de interés común relacionados con la nutrición, la seguridad alimentaria y el medio ambiente;
- Colabora con las organizaciones internacionales para construir la base científica para la salud pública;
- Brinda acceso a una red multidisciplinaria de científicos destacados del gobierno, la academia y la industria;
- Permite la discusión sobre asuntos científicos sobre una base precompetitiva;
- Permite una financiación colectiva y rentable para construir una base científica oportuna en áreas de interés para la salud pública;
- Ayuda a las partes interesadas [stakeholders] de ILSI a permanecer actualizadas en asuntos de nutrición, seguridad alimentaria y medio ambiente.
- Ofrece una oportunidad para contribuir con la investigación científica la cual es ampliamente reconocida por su gran credibilidad, confiabilidad y relevancia.
ILSI es liderada por su Consejo Directivo. Los estatutos de ILSI estipulan que por lo menos la mitad de los miembros del Consejo Directivo provenga del sector público. El Consejo Directivo tiene la responsabilidad de establecer y hacer cumplir las políticas organizacionales y garantizar la integridad científica y la transparencia financiera.
A diferencia de las asociaciones comerciales, ILSI no hace cabildeo ni manifiesta posiciones explícitas sobre la legislación. Las Políticas Obligatorias de ILSI prohíben expresamente las actividades de cabildeo de cualquier índole.
ILSI aboga por el uso de la ciencia para tomar decisiones que afectan la salud humana y ambiental, pero no hace recomendaciones de políticas ni busca influir en los resultados legislativos orientados hacia una decisión en particular.
Las distintas perspectivas hacen que la investigación se fortalezca. La participación y el debate multi-sectorial de ILSI logran resultados con una base científica más creíble. Debido a la estructura público-privada única de ILSI, sus Entidades pueden llenar los vacíos de conocimiento y así servir a la sociedad de maneras en las que ninguna otra organización lo podría hacer por sí misma. ILSI sostiene que se debe juzgar a toda la ciencia sobre los méritos del diseño del estudio, la metodología y la validez de las conclusiones, independientemente de la fuente de financiación.
10 Datos acerca de ILSI
- ILSI no hace cabildeo, y no pretendemos ejercer influencia sobre personas, posiciones, y/o políticas específicas.
- ILSI prohíbe explícitamente defender los intereses comerciales de nuestras compañías afiliadas u otras partes.
- ILSI es una organización de interés público, sin ánimo de lucro financiada en su mayoría por compañías provenientes de distintas industrias. Esta financiación es agrupada y los científicos de la academia, el gobierno y la industria trabajan conjuntamente para identificar y abordar los vacíos de conocimiento*.
- El modelo operativo multisectorial de ILSI está diseñado específicamente para que no exista un solo interés dominante. Las decisiones sobre nuestros esfuerzos investigativos requieren de una representación y de acuerdos por parte del gobierno, la academia y los científicos de la industria.
- ILSI presenta investigaciones precompetitivas que informan sobre las acciones de otros científicos.
- ILSI acoge un diálogo respetuoso sobre la seguridad alimentaria, la nutrición y la salud, la ciencia de riesgo y toxicología y la agricultura sostenible por parte de los stakeholders con una perspectiva amplia y variada desde el gobierno, la academia y la industria.
- ILSI se enorgullece de su ciencia. Las descripciones de los proyectos y su impacto se pueden encontrar en nuestro sitio Web bajo la sección “Ciencia e Investigación”.
- ILSI tiene el compromiso de lograr y mantener los más altos estándares de integridad científica a través de nuestros Principios de Integridad Científica, que se encuentran en nuestras Políticas Obligatorias.
- ILSI sabe que las alianzas público-privadas son importantes porque las diversas perspectivas hacen que la investigación sea más sólida. La participación multisectorial de ILSI y el debate resultan en una base científica más creíble. Debido a la estructura única de ILSI, sus Entidades son capaces de llenar los vacíos de conocimiento y servir a la sociedad de tal manera en que ninguna otra organización podría hacerlo por sí misma. ILSI sostiene que se debe juzgar a toda la ciencia de acuerdo con los méritos del diseño del estudio, la metodología, y la validez de las conclusiones, independientemente de la fuente de financiación.
- La investigación debe ser fáctica, transparente y diseñada con objetividad, de acuerdo con los principios aceptados de la investigación científica. El diseño investigativo generará una hipótesis redactada adecuadamente y la investigación responderá las preguntas adecuadas, en lugar de favorecer a un resultado en particular.
Conceptos erróneos más comunes
En los años 80s, ILSI fue caracterizada de manera inexacta como una defensora de los intereses del tabaco. Esta caracterización inició con un memorando de la OMS y ha sido adornada a los largo de los años por otros autores y publicaciones. Aunque esta denuncia general se ha repetido con frecuencia, ni el memorando de la OMS ni ningún crítico de ILSI ha identificado jamás un solo caso en el que ILSI haya contactado a funcionarios de organizaciones internacionales o a gobiernos en nombre de las tabacaleras, o en situaciones en las que ILSI haya realizado una campaña de relaciones públicas o de otra índole en favor de los productos del tabaco. La fuente original de las denuncias relacionadas con el tabaco es un memorando de siete páginas, sin firmar y sin revisión por pares, publicado en el sitio Web de la OMS en 2001 por parte de la Iniciativa para Liberarse del Tabaco de la OMS en 2001. El memorando criticaba a ILSI debido a que los documentos internos de las tabacaleras, obtenidos en un litigio en contra de aquellas compañías, sugerían que las compañías de tabaco estaban interesadas en el trabajo de ILSI, incluyendo un estudio acerca de los peligros de inhalar humo. Sin embargo, ninguno de los estudios financiados por ILSI pone en duda los peligros de fumar, como lo han afirmado algunos escritores. Una publicación de ILSI, contiene tres (de un total de 33) capítulos que hacen referencia al tabaco. Dos de esos documentos demostraron de manera inequívoca, que el tabaquismo pasivo tiene efectos adversos en las infecciones respiratorias y la función pulmonar, especialmente en niños, y que los datos epidemiológicos demuestran un “aumento estadísticamente significativo en el riesgo de cáncer pulmonar de cerca del 40%” para aquellos no fumadores casados con fumadores. El tercer artículo no abordó el riesgo, pero si comparó las fortalezas y debilidades de los diseños del estudio para evaluar el riesgo. Tal como lo observó ILSI en una carta de 2002 a la Revista Panamericana de Salud Pública [American Journal of Public Health], “quedan pocas dudas de que la industria tabacalera ha participado en una variedad de tácticas para frustrar los esfuerzos de la salud pública”, pero “como organización científica, ILSI deplora estas tácticas y se opone firmemente a cualesquiera intentos de torcer y manipular la ciencia”. Para conocer la declaración actual sobre la posición oficial y de largo tiempo de ILSI, acerca de los peligros del tabaco, remítase a la Declaración de ILSI sobre los Productos del Tabaco y las Compañías que lo Producen y Venden.
En 2015, el Consejo Directivo de la Asamblea Mundial de la Salud terminó la condición de ILSI como una ONG acreditada con la Organización Mundial de la Salud (OMS). La razón dada por el Consejo Directivo de la OMS no fue, como muchos lo han mencionado, por la cercanía que tenía ILSI con los intereses de la industria. Por el contrario, el Consejo Directivo de la OMS dio como su razón, el hecho de que ITC, una compañía de la India cuya división de alimentos había sido miembro de la entidad de ILSI en la India, y tenía otras divisiones que fabricaban y vendían productos del tabaco. Dichas divisiones no-alimenticias de ITC de ninguna manera tenían relación con ILSI India, la cual no se involucró en actividades relacionadas con el tabaco. Adicionalmente, unos meses antes de la decisión de la Consejo Directivo de la OMS, ILSI modificó sus estatutos para inhabilitar la afiliación a entidades de ILSI, a cualquier compañía cuyas subsidiarias o compañías matrices, o co-divisiones estuviesen involucradas en la fabricación, venta o distribución de productos del tabaco. Aunque ILSI llamó la atención de esta decisión a la OMS antes de la decisión de su Consejo Directivo, éste prosiguió a terminar con la condición de ONG de ILSI aduciendo que no tenía evidencia de que ILSI había implementado su decisión. Aunque ILSI pudo haber proporcionado dicha evidencia, el Consejo Directivo de la OMS no le brindó esa oportunidad.
El hecho de que ILSI no tuviera su condición de ONG, no alteró la larga y colaborativa relación de ILSI con la OMS, bajo la cual ILSI y la OMS habían acordado planes de trabajo anuales e ILSI proporcionaba los recursos para apoyar las actividades de interés mutuo para ILSI y la OMS. La OMS se mantuvo dispuesta a aceptar el apoyo de ILSI. Sin embargo, en 2016, el Consejo Directivo de ILSI votó para separase de las actividades de la OMS mientras que ésta decidió sobre e implementó el entonces pendiente Marco para la Colaboración para Agentes No-Estatales. Un funcionario de la OMS le informó a ILSI que si el Marco se adoptaba e ILSI permanecía comprometida en las actividades con la OMS, la OMS probablemente caracterizaría a ILSI como una asociación comercial, bajo su nuevo Marco, ya que ILSI recibía la mayoría de su financiación por parte de la industria. El funcionario de la OMS indicó que al clasificar a ILSI, la OMS no tendría en cuenta ninguna de las medidas tomadas por ILSI para garantizar que estaba al servicio del interés público. El Consejo de ILSI no estaba dispuesto a aceptar lo que consideraba ser una falsa categorización por parte de la OMS. Por esta razón, el Consejo de ILSI decidió terminar su relación con la OMS, al menos temporalmente.
Cuando un científico pertenece al Consejo de una entidad de ILSI, participa en un comité científico de ILSI, o se involucra en otras actividades de ILSI, lo hace a título personal, no como representante de su organización. Estos representantes prestan sus servicios a ILSI como expertos voluntarios sin remuneración y desempeñan sus roles profesionales principales por fuera de ILSI. Dichas personas usualmente no representan a ILSI cuando están participando en actividades que no son de ILSI. Sin embargo, en ocasiones excepcionales cuando ellos representan a ILSI en reuniones de terceros, ILSI espera que ellos claramente manifiesten su condición de representantes y que cumplan con las normas de divulgación establecidas por aquellos terceros.
El Dr. Alex Malaspina, fundador de ILSI y ex-ejecutivo de Coca-Cola, dejó de ser Miembro del Consejo, Funcionario, o Representante alguno de ILSI desde 2001. Él no tiene ningún cargo con ILSI y cualquier comentario que haya hecho posteriormente fueron en su calidad de ciudadano privado y retirado desde hace mucho tiempo, sin ninguna autoridad para orientar o influir en las acciones de ILSI.
El Comité Ejecutivo del Consejo Directivo de ILSI suspendió su afiliación con ILSI México el 2 de noviembre de 2015 por participar en actividades que parecían apoyar la derogación del impuesto a las bebidas azucaradas en México [comunicado de prensa]. Tal como lo reflejan las Actas de la reunión del Comité Ejecutivo, ILSI impuso la suspensión porque sus políticas prohíben explícitamente la participación en actividades comerciales o de cabildeo. ILSI México fue reincorporada el 12 de julio de 2016, después de haber cumplido con los requisitos para ajustarse al Código de Ética de ILSI, revisar su Consejo Directivo actual y tomar otras acciones para evitar una recurrencia. A fin de cuentas, ILSI México nunca se pudo recuperar de la suspensión, y desde el 10 de octubre de 2019, ILSI México ha cesado sus operaciones. Las operaciones futuras de ILSI en México las retomará ILSI Mesoamérica.
En junio 3 de 2019, la Dra. Sarah Steele, del Departamento de Política y Estudios Internacionales de la Universidad de Cambridge, y sus colegas publicaron un artículo en Globalization and Health, titulado: "¿Las ONG financiadas por la industria promueven los “estudios orientados hacia la defensa” o “de ciencia basada en la evidencia”?: un estudio de caso sobre el Instituto Internacional de Ciencias de la Vida (ILSI)”. Los autores de este artículo inicialmente reclamaban (incorrectamente) que ILSI había castigado a ILSI México porque no era lo suficientemente favorable con los intereses de la industria. Posteriormente ILSI le señaló a la publicación que los autores habían malinterpretado el comunicado de prensa de ILSI sobre la suspensión, y que la sanción de suspensión había sido para castigar la prohibida defensa legislativa por parte de la entidad mexicana. Después de evaluar las actas sobre la decisión del Comité Ejecutivo en relación con la suspensión, la publicación expidió la siguiente corrección formal: la publicación determinó que había malinterpretado la correspondencia relacionada con la entidad ILSI en México y que desde entonces había expedido una corrección formal.